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[Escribe: Fernando Movalli] Esta serie de cuartos de final por el grupo mundial entre Italia y la Argentina huele a muy pareja y con partidos largos de puntos disputados. Salvo el extraño caso de Del Potro que supera a todos en nivel pero por su recurrente problema de muñeca hoy es menos que cualquiera, el resto parte con una llamativa paridad. Una circunstancia que quizás ni el localismo de los europeos pueda torcer ya que se juega sobre polvo de ladrillo y se espera una gran cantidad de simpatizantes albicelestes.
El capitán Orsanic, consecuente con decidir en base al día a día del jugador y no encandilarse con la figura o historia de cada uno, pone en cancha para los singles de este viernes el mejor mix entre presente y experiencia en Copa Davis.
Delbonis abre con Seppi, un jugador versátil que se adapta a cualquier superficie y que juega desde el 2004 para la selección italiana, tema no menor a la hora de entender que el azuleño se va a encontrar con un rival copero. No obstante, el zurdo argentino ya dio muestras de su carácter para estas porfías y su nivel del presente lo ayuda y mucho.
Para el mediodía de nuestro país las imágenes nos devolverán el regreso de “Pico” Mónaco a la selección y en su superficie preferida. A la experiencia por su extensa carrera, el tandilense le sumó un óptimo regreso luego de sus lesiones y esta motivación especial de volver a calzarse la celeste y blanca no es poca cosa para él. Tendrá ante sí a otro experimentado que vuelve estimulado también luego de varias lesiones como lo es Fognini. Al talentoso pero irregular italiano, hoy la raqueta número uno de su país, aún lo recordamos por su extraordinario nivel en Febrero del 2014 cuando se convirtió en el verdugo de nuestra selección en Mar del Plata.
Dos choques de apertura abiertos a cualquier posibilidad de resultados y fundamentales para la continuidad y resolución de una seria que pinta como muy complicada para ambas selecciones.
