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El DT argentino Alejandro “Pachorra” Sabella fue resistido por muchos desde las mismísimas eliminatorias sudamericanas. Su introvertida personalidad, alejada de un supuesto carisma siempre necesario para el liderazgo, fue motivo de diversas críticas por parte de sus detractores. La no convocatoria del “Apache” Tevez completó aquel pensamiento de muchos en cuanto a su falta de conducción y manejo del vestuario en un grupo que mezclaba egos y millones en la misma peligrosa proporción.
Sin embargo, el mensaje permanente que privilegiaba a grupo por sobre lo personal y a lo colectivo por sobre lo individual tuvo sus frutos. Tanto en la fase deportiva como en lo social a partir de ser aceptado por la gran mayoría de nuestro pueblo, y de “yapa”, ser tomado como ejemplo de lo que deberíamos transitar de ahora en más como país. Incluso llevado a la práctica comunicacional al comentárselo a la Presidente Cristina Fernandez al recibir al plantelo en las primeras horas del lunes.
Un sabio mensaje para apostar a trabajar en equipo y sin recelos o envidias que solo llevan a destruir las buenas relaciones y a la paz misma en consecuencia.
