Como lo expresaba la semana anterior, en nuestra sociedad somos muy proclives a meter todo y a todos en la misma bolsa en determinadas ásperas circunstancias. Apuntaba que si “todos” somos culpables en realidad “nadie” lo termina siendo en realidad.
Quien no ha escuchado o leído el que …“Todos los políticos” tal cosa o que …“Todos los dirigentes” tal otraetc, etc.. Lo cierto es que tan remanidaexpresión termina siendo vacía de contenido y así mismo se la sigue utilizando.
Por caso y por estas últimas semanas de ello hubo ejemplos claros como “Boca fue un desastre y hasta hace peligrar la quinta plaza al Mundial de selecciones”, “Los de Laspiur y El Arañado hicieron tal cosa”, “Todo el fútbol infantil es muy violento”, “Lo de Granaderos es una vergüenza”, “Lo de la Liga es impresentable”, “Los Periodistas no dicen todo lo que saben” y otros etc, etc… leídos y escuchados por doquier salvo que alguien haya vivido en un termo o quiera negar la estricta realidad.
Injusto por donde se lo mire y cómodamente hipócrita por ese “le apuntamos al bulto” y metemos a todos y todo en el mismo despreciable recipiente.
Se sabe, lo de Boca fueron diez tarados y otros tantos cómplices pero no los millones de honestos hinchas del club de la ribera porteña. Un símil para aquel despropósito en el escenario de U D Laspiur y también para la “particularidad” de un mal comportamiento de un pibe infantil. También para la “irregularidad administrativa” de algunos muy poquitos en el caso de Granaderos de Las Varas en aquel partido denunciado a los cuatro vientos por la gente de Mitre.
La inmensa mayoría debería gozar públicamente de esa credibilidad bien concebida en el diario vivir más allá de que algunos nos quieran tomar de tontos negando la realidad a la vista. Esa realidad que, por ejemplo, el Tribunal de Disciplina se empeña en manejar con sano criterio y sentido común y que ha incomodado incluso a los propios dirigentes de la Liga y entristecido a su delegado en nuestra zona. Ocultado también por algún periodismo regional conservador que aún en pleno 2015 termina subestimando la inteligencia de sus receptores aprovechando lo que suponen es la inocencia de su propia gente. Porque respecto a ello y solo respecto a ello me pregunto al igual que la inmensa mayoría en la región : ¿ No era más lógico generar un espacio de reeducación y contención para el pibe de 12 años antes que aplicarle rápidamente “diez fechas” de suspensión como si fuese un adulto profesional y dejarlo a la deriva ? … ¿ Noera más racional analizar con más detenimiento el caso de Granaderos e indagar el porqué de una situación irregular hoy criticado y resistido por el resto de la dirigencia colega generando un evidente malestar que pudo evitarse solo con criterio y sentido común ? … ¿ Cuál fue el motivo o apuro para “sacarse el lazo” rápidamente dejando las secuelas que están a la vista ya no solo en el mundo deportivo ?Es evidente que, más allá de los artilugios en el manejo de ciertas reglas fáciles de reacomodar en lo legal, no hubo intención de pensar con hombría de bien tanto en el futuro del pibe como en la inmensa honorable mayoría de la querida institución varense. De hecho y como siempre, no esperemos respuestas de quienes seguro ni pisan un campo de juego y solo se manejan desde su intocable pedestal en base a artículos e incisos a posteriori de informes “flexibles” que se suelen adecuar con el paso de las horas como muchos lo denuncian. Informes muchas veces faltos de equidad y acomodados no a la realidad de lo sucedido sino a la convenienciaen función de arreglos y la presines. Por esa misma razón, quizás aquel “Todos” de la bolsa grande a ellos si pueda caberles pero de ninguna manera al enorme resto que solo es rehén de la fortuita circunstancia y de sospechas que, lamentablemente, siempre rondarán para “Todos” en el imaginario popular. Hipocresías incluidas, para quienes callan las verdades evidentes o directamente ejercen el permanente ejercicio de la mentira.